La 35.ª edición reunió a más de 400 parejas y consagró a los mejores talentos estudiantiles del país.
Trujillo reafirma su título de capital de la marinera, con la 35.° edición del Concurso Nacional Escolar de Marinera, evento organizado por el Gobierno Regional de La Libertad, a través de la Casa de la Identidad Regional, que reunió este año más de 400 parejas de niñas, niños y jóvenes provenientes de diversas regiones del Perú.
La competencia tuvo lugar en el coliseo del histórico colegio Santa Rosa y fue inaugurada por la gobernadora regional de La Libertad, quien destacó el impacto formativo y cultural de este tradicional certamen.
Destacaron por su talento
El certamen coronó a los nuevos campeones escolares de marinera en cada una de las categorías. Entre los destacados, en Infantes A se impusieron Sophia Cayetana López Campos y Eadrien Gabriel Echevarría Ysla; en Infantes B, los primeros lugares fueron para Gia Airana Mendoza Neciosup y Marco David Castillo Reátegui.
La categoría Infantiles A tuvo como ganadores a Mia Sheccid Polo Miñano e Ítalo Varek Otiniano Purizaga, mientras que en Infantiles B triunfaron Asthrid Arianna Lafitte Guevara y Santiago Rafael Sumari Carrión.
En la categoría Juvenil A, el primer puesto fue para Alessandra Mariela Gamarra García y Víctor Manuelle Cayo Alfaro, y en Juvenil B, el título quedó en manos de Keyla Victoria Rodríguez Cruz y Jorge Nikolay Aguilar Valles.
La categoría Unidad consagró a Naydeline Mangelly Velásquez Hilario y Niber Elvis Chanducas Amambal. Y, finalmente, en Adultos – Superior, la victoria fue obtenida por Valeria Cristina Ocas Merejildo y Jesús Antonio Atahopilco Ortiz, quienes demostraron un impecable dominio técnico y artístico.
Una fiesta de identidad y tradición
Durante su intervención, la gobernadora subrayó que el concurso es fruto del compromiso permanente con la formación integral de la niñez y juventud, fomentando valores cívicos y el amor por nuestras raíces. Creado en 1990, este certamen ha evolucionado de ser una competencia regional a consolidarse como una tradición nacional.
De esta manera, el concurso se consolida nuevamente como una de las actividades culturales más importantes del calendario escolar en el país. Su realización no solo realza la riqueza cultural de la región, sino que también preserva la tradición de la marinera en el lugar donde nació y donde continúa siendo un referente vivo de la memoria colectiva trujillana.
